LOS SANFERMINES QUE HA VIVIDO EL GRAN HOTEL LA PERLA

DESDE 1881 HASTA LA ACTUALIDAD

FIESTAS DE SAN FERMÍN 1968

         Se cumplían ya siete años del fallecimiento en Estados Unidos del popular escritor Ernest Hemingway, a quien se le atribuía, y con mucha razón, el fuerte incremento de turismo extranjero que se experimentaba cada año en las sucesivas ediciones sanfermineras.
         El Ayuntamiento de Pamplona había decidido este año perpetuar el agradecimiento y el reconocimiento de la ciudad hacia aquella labor de difusión que realizó Hemingway con su novela Fiesta y con sus numerosas crónicas periodísticas, todo ello en beneficio de la popularidad de Pamplona.
         Así pues,  a la una del mediodía del 6 de julio, el alcalde de Pamplona, acompañado de la viuda de Ernest Hemingway, inauguró junto al callejón de la Plaza de Toros el monumento que hoy conocemos en memoria del escritor y novelista. Se trataba de un busto en bronce, esculpido por Luis Sanguino, sobre un recio pedestal que pesaba, y pesa, nada menos que ocho mil kilos; el pedestal en cuestión, para quien quiera saberlo, es un bloque de granito traído hasta Pamplona desde Navacerrada. En su parte frontal se colocó la siguiente inscripción:

Ernest Hemingway
Premio Nobel de
Literatura
amigo de este pueblo y
admirador de sus
fiestas
que supo describir y propagar.
La Ciudad de Pamplona
San Fermín
1968

         A la vez que se inauguraba este monumento, se procedió a descubrir la placa, tallada en piedra, con la inscripción Paseo de Hemingway, dando así cumplimiento al acuerdo tomado por el consistorio pamplonés el 12 de septiembre de 1967 en el que se acordó dar este nombre al paseo que bordeando la muralla va desde la entrada de los toros en el encierro en la Plaza de Toros hasta la puerta de los corrales y continúa al final hasta el parque de Bomberos.

         Ese mismo día se inauguraba en la localidad de Berrioplano el parador “El Toro”, ante el que se colocó un conjunto escultórico sobre el encierro de Pamplona, a tamaño natural, y fundido en bronce, en el que aparecen dos toros y tres mozos. Cada uno de los morlacos pesa 480 kilos, mientras que cada mozo oscila entre los 80 y los 100 kilos.

         Dentro del aspecto taurino, la feria de este año contó con la presencia de las ganaderías de Antonio Martínez Elizondo, Cesar Moreno, Herederos del Conde de la Corte, Juan Pedro Domecq, Carlos Urquijo, José Benitez Cubero, Fermín Bohorquez, y Salvador Guardiola. Entre tanta ganadería de prestigio brilló con luz propia la navarra de Cesar Moreno, cuyo toro “Ventero”, lidiado el día 8 en la segunda de la feria se hizo merecedor del Trofeo Carriquiri, otorgado al mejor toro de la feria.
         Las reses de estas ganaderías fueron lidiadas, con desigual suerte, por los diestros Antonio Ordoñez, Cesar Girón, “Antoñete”, Dámaso Gómez, “Miguelín”, Diego Puerta “El Viti”, Paco Camino, José Fuentes, “Paquirri”, Palomo Linares, Angel Teruel, Miguel Márquez, y Manolo Cortés.
         Como es normal, dentro del cartel taurino oficial que figuraba en los programas hubo variaciones a considerar; así pues, el día 9 “Miguelín” fue sustituido por José Fuentes, mientras que “Mondeño”  y Angel Teruel sustituyeron a Paco Camino en las corridas del 10 y del 12 respectivamente. La corrida del día 10, que fue suspendida a causa de la lluvia, se celebró en la mañana del 11.
         La anécdota la puso el matador José Fuentes quien, después de pensárselo mucho, se decidió a correr el encierro de los Domecq, y lo hizo con tan mala fortuna que cayó al suelo y tuvo que ser atendido en la enfermería; “es la primera y última vez que corro en el encierro” manifestó posteriormente.

         Pero el encierro peligroso fue el del día 9, con un balance de un herido grave y treinta y siete leves, y todo por un montón que se formó en el callejón; la causa... ¡un sombrero!.




PINCELADAS


Alcalde.- D. Angel Goicoechea

Horario.- Encierro: 7 de la mañana; Corrida de toros: 5’30 de la tarde

Chupinazo.- D. Agustín Latorre

Pañuelo de honor: Este galardón sanferminero fue concedido este año al cuerpo médico del Hospital Militar, del que era su director el doctor Colella.

Visitantes ilustres: Los visitantes más destacados de este año en las fiestas sanfermineras fueron don Carlos de Borbón y su esposa doña Irene.

“Pudo quitarle la vida... y se conformó con su calzón”: Sucedió en el encierro del 11 de julio, concretamente en el redondel del coso pamplonés. El joven Bandry Armand, natural de Estrasburgo, había debutado este día como corredor del encierro con todo lo que aquello conllevaba de emoción, la misma de un chiquillo en el día de su primera comunión.
         Todo iba muy bien... hasta que llegaron los toros al ruedo. Bandry Armand quiso sentir todo lo que se siente ante una fuerte subida de la adrenalina, ante el riesgo, ante un morlaco como aquél que creía lejano. Y vaya si lo sintió. En un momento el toro se plantó ante él, le cogió contra las tablas, lo volteó, lo tiró para arriba y para abajo, le quitó los pantalones y los calzoncillos... ¡y todo ello ante 25.000 espectadores!.
         La anécdota fue recogida al día siguiente por la prensa local bajo titulares como “Más vale risa que luto”, o “Pudo quitarle la vida... y se conformó con su calzón”.

Pedro Martín Balda.- Los sanfermines del siglo XX tienen varios pilares sin los que sería muy difícil entender la fiesta; uno de ellos es el cartelista Pedro Martín Balda, autor de un importantísimo número de pancartas de las peñas en las que imprimió un estilo propio con un arte y una gracia inigualables. Precisamente este año, en el que ocho peñas lucieron pancarta de este artista, Pedro Martín Balda cumplía 25 años como cartelista festivo.

Parroquia de San Jorge.- Coincidiendo con la festividad de San Fermín el barrio de San Jorge inauguró su parroquia, de la que don Demetrio Goñi Gaztambide fue su primer párroco.

Las peñas con Matías Prats.- El día 9 la Comisión de Peñas de Pamplona rindió un merecido homenaje a al popular y televisivo comentarista taurino Matías Prats. El acto se celebró en el local de “La Jarana”, y durante el mismo fue obsequiado con un pañuelo de cada peña. Finalizado el homenaje, las peñas acompañaron a don Matías hasta el Hotel Maisonnave, en donde le dedicaron una prolongada serenata.

Bibliografía.-
·        CAMPO, Luis del. El encierrillo. Colección “Navarra. Temas de Cultura Popular”. Diputación Foral de Navarra. Pamplona, 1968.