LOS SANFERMINES QUE HA VIVIDO EL GRAN HOTEL LA PERLA

DESDE 1881 HASTA LA ACTUALIDAD

FIESTAS DE SAN FERMÍN 1954

         El Ayuntamiento de Pamplona volvió de nuevo este año a la carga organizando un Pregón de Fiestas. Vista la experiencia anterior, en esta ocasión se hizo de forma muy diferente. Es así como el día 4 hubo un acto público en el Teatro Gayarre en el que el ilustre conferenciante y escritor taurino don José Mª de Cossío, previamente presentado por el Archivero municipal don Vicente Galbete, obsequió al público pamplonés con su particular y literario Pregón de Fiestas.

         Las peñas pamplonesas tuvieron también su rifi rafe con el Ayuntamiento. Este había decidido aumentar este año su ayuda económica a las cuadrillas, concediéndoles ahora una subvención de 25.000 pesetas para las nueve peñas, que la aceptaron a fin de no perjudicar a los sanfermines, pues no era esto lo que ellas querían; su propuesta, que quedaba ya vigente para el próximo año, era que fuese el Ayuntamiento quien pagase la música, prescindiendo así las peñas de ninguna otra subvención en dinero, que no queremos recibir, y de la publicidad en el reverso de las pancartas, para que nuestras peñas puedan salir a la calle más dignamente, por su buen nombre y por el de Pamplona.
         El comunicado que éstas emitieron iba firmado por las nueve peñas sanfermineras, es decir: “La Única”, “La Jarana”, “El Bullicio”, “Muthiko Alaiak”, “Oberena”, “Anaitasuna”, “Los de Bronce”, “Irrintzi” y “Alegría de Iruña”.

         Y la otra gran polémica que se palpaba en la calle, en el Ayuntamiento y en los medios de comunicación, era lo concerniente a la seguridad del encierro. Era unánime la impresión de que en los últimos años se estaba viviendo un continuo riesgo debido a la presencia de patas y de personajes muy interesados en salir en las fotos. Finalmente no se aplicó ninguna medida extraordinaria, pero los mozos pamplonicas pusieron especial esmero en evitar la presencia de “corredores” que pudiesen poner en peligro la vida de nadie.
         Lo cierto era que el encierro se había convertido a nivel internacional en el gran reclamo de nuestras fiestas. Bastaba con ver el interesante desfile de personajes que hubo este año en Pamplona atraídos por esta modalidad taurina.
         El primero en llegar fue el joven Sadruddin Khan, príncipe indio e hijo del Aga Khan, el hombre más rico del mundo. Este muchacho vivió las fiestas con toda intensidad, llegando incluso a correr en el encierro; es el espectáculo más grande y fuerte del mundo, decía del encierro este magnate.
         Otro famoso que nos visitó fue el actor Anthoni Quinn. Había venido a España a rodar una película sobre toreros y no quiso perderse la feria de Pamplona para observar a todos los actores que salían al ruedo. Pero si algo le impresionó, eso fue el encierro: no he visto nunca nada que supere al encierro en emoción, manifestó entonces; aunque también le gustaron otras cosas: Haga usted constar –le decía a un periodista- que la salida de las peñas de la Plaza, me ha parecido uno de los mejores números de las fiestas.
         Y el tercer personaje de renombre que pasó por los sanfermines fue el mítico Orson Wells. Estuvo tan sólo dos días, y lo cierto es que no dejó muy contentos a los periodistas que apenas consiguieron arrancarle algún monosílabo, aunque si muchas y ficticias carcajadas.

         En los toros hubo de todo. Lo más destacable es que la lluvia obligó a suspender la quinta corrida, la del día 11, que fue trasladada al día 17. En esta se aprovechó para presentar al rejoneador Angel Peralta, a quien se anunciaba como el mejor rejoneador de todos los tiempos.
         Aquél año estuvieron presentes en el ruedo pamplonés los matadores: Julio Aparicio, Pedro Martínez Pedrés, Carlos Corpas, Cesar Girón, Rafael Ortega, Antonio Ordoñez e Isidro Marín. Las ganaderías participantes fueron las de Atanasio Fernández, Ignacio Sánchez Sepúlveda de Yeltes, Fermín Bohorquez, Eduardo Miura, y la de Salvador Guardiola.
         Ya fuera de programa, el día 18 se cerró el ciclo taurino con la celebración de la “corrida de la prensa”, en la que los diestros Antonio Bienvenida y Manolo Vázquez se las vieron con seis toros de don Antonio Pérez; lo más destacable de esta corrida fue la nota de color que pusieron en las gradas los uniformados marines norteamericanos del “Eaton”.


PINCELADAS

Alcalde.- D. Javier Pueyo

Horario.- Encierro: 7 de la mañana.  Corrida de toros: 5’30 de la tarde.

Chupinazo.- D. Nicolás Ibarra

Gran retreta militar.- Se celebró el 6 de julio, a la noche, como homenaje de la guarnición militar a la ciudad de Pamplona. Participaron, y desfilaron por las calles de la capital navarra, las Bandas de Tambores y Cornetas de todos los Cuerpos y la Música del Regimiento de Cazadores de Montaña nº 7. Cada una de las ocho bandas participantes desfiló por diferentes calles, concentrándose todas a las diez de la noche en la Plaza del Castillo.

El Frontón Labrit como local social.- El domingo día 4 el Oberena celebró en Pamplona el Día de la Alegría, dedicado a la juventud, centrando sus actos en el Frontón Labrit. En el entreacto del festival principal el reverendo don Luis Navarro, consiliario de esta peña, anunció que durante las fiestas el Frontón Labrit quedaría como local social abierto a toda la juventud de Pamplona, para que no corra peligro y tenga dónde divertirse.

Cine público.- Era gratuito, y se proyectaba por la noche, generalmente después de los fuegos artificiales. Se celebró en la Plaza del Castillo hasta el año 1934. En 1935 se colocó en la explanada existente frente a la puerta principal de la Plaza de Toros. Al año siguiente se trasladó a la Plaza del Vínculo, en donde estuvo hasta 1949 (en 1945 no hubo). Cambió después a la Plaza de la Compañía (1950) y a la Plaza de Santo Domingo (1951), instalándose finalmente en la Plaza de San Francisco, desde 1952 hasta 1959, año en el que hubo por última vez.
         Este año de 1954 las sesiones empezaron el día 6 y acabaron el 20. Entre otras películas se pudieron ver: “Mi adorado Juan”, “Mr. Beldevere, estudiante”, “Duda”, “De ilusión se vive”, “Despertó su corazón”, “El demonio del mar” y “Almas en la hoguera”.

Nuevos locales del Muthiko Alaiak.- Los mozos del Muthiko vivieron las fiestas de este año en unos nuevos locales. Los anteriores, situados en la calle Mayor, se habían quedado ya pequeños. El 24 de octubre del año anterior inauguraron nuevos locales en la calle San Francisco.